Historia, autobiografía y asesinos en serie

<<La verdad es que jamás alcanzaremos el pasado si no nos colocamos en él de golpe. Esencialmente virtual, el pasado no puede ser captado por nosotros como pasado a no ser que sigamos y adoptemos el movimiento mediante el que se abre en imagen presente, emergiendo de las tinieblas a la luz. En vano buscaremos la huella en alguna cosa actual y ya realizada; sería lo mismo que buscar la oscuridad bajo la luz […]

Imaginar no es acomodarse. Indudablemente, un recuerdo, a medida que se actualiza, tiende a vivir en una imagen; pero lo recíproco no es cierto, y la imagen pura y simple no me llevará al pasado más que si he ido efectivamente a buscarlo en el pasado, siguiendo así el progreso continuo que le ha llevado de la oscuridad a la luz>>. Henri Bergson “Memoria y vida. Textos escogidos por Gilles Deleuze” Alianza Editorial.

<<El montaje vuelve equívoca, improbable, incluso imposible, toda autoridad del mensaje o del programa. Es que, en un montaje de este tipo, los elementos -imágenes y textos- toman posición en vez de constituirse en discurso y tomar partido.

La crítica efectuada por Brecht en cuanto a la “imaginación  huidiza” con su “excesiva inestabilidad en la alternancia de imágenes”, da aquí lugar a una imaginación operativa aunque singularmente inestable en la alternancia de las imágenes fotográficas. Pero esta inestabilidad misma produce una agitación, un movimiento crítico […]>>. Georges Didi-Huberman “Cuando las imágenes toman posición”. Antonio Machado Libros.

“Los libros” es una pieza en la que comparto con dos espectadorxs tres libros en los que propongo una lectura autobiográfica fragmentada y extrareferencial.

  • Uno de los libros es “La Cenicienta”: audiolibro en vinilo y cuaderno intervenido.
  • Otro, es un álbum de recortes de los años 90.
  • El último es un libro de historia del arte.

En este último he colocado a las imágenes un pie de foto y unas láminas de papel de cebolla dibujadas o limpias. El pie de foto acompaña a la imagen y la desliza a otro lado. El papel de cebolla crea la sensación de movimiento (visual y conceptual).

El pasado sábado, surgía esta herramienta del pie de foto (la alegoría de Benjamin) en “Ser o no ser (un cuerpo)” con Amalia Fernández y probábamos cuáles eran las combinaciones que mejor funcionaban a unos u otros niveles.

Parece que todo se mueve entre re-hacer el Kriegsfibel de Brecht o el Atlas Mnemosyne de Warburg.

Esta es una prueba con 5 (10) imágenes.

Los pies de foto son declaraciones de asesinos en serie que recopilé en 2010.

"No hay mejor asesino que yo. No me arrepiento de nada y, si pudiera, sin duda volvería a hacerlo…"

“¿Por qué no lo puedo matar si, de todas maneras, vamos a morir?”

"Odio a este mundo y no estoy avergonzado de mis acciones. Estoy listo para morir. No tengo resentimientos".

“Será como los disturbios de Los Ángeles, como el atentado de Oklahoma, como la Segunda Guerra Mundial y Vietnam, como Duke y Doom todo mezclado. Quiero dejar mi huella en el mundo”.

"Para mí, matar es como romper una colcha. Hombres, mujeres, ancianos, niños: todos son lo mismo. Nunca me he arrepentido por aquellos a quienes he matado. No amor, no odio, sólo ciega indiferencia. No los veo como individuos, sino como cosas".

“Ellos dicen que es el numero de personas que maté, yo digo que es acerca del principio que me impulso a matarlos”.

4

“Yo soy la proyección de la mentira en que vives. Júzgame y senténciame, pero siempre estaré viviendo en ti”.