a ras de suelo

Eran tres los géneros y estaban así constituidos por esta razón: porque el macho fue en un principio descendiente del sol; la hembra, de la tierra; y el que participaba de ambos sexos (andrógino), de la luna, ya que la luna participa también de uno y otro astro. Y circulares precisamente eran su forma y su movimiento, por semejanza con sus progenitores. Eran, pues, seres terribles por su vigor y su fuerza.

[El banquete. PLATÓN]

El desfigurado ser andrógino explota, su vigor contagia el espacio. La catarsis se produce. Próximamente llegará el caos. El movimiento se presenta mitigado por la energía. Aleccionado.
Ritual de lo íntimo.
…respiración…
Lo cómico se erige como herramienta de interacción, los espectadores entran en la partitura, las fronteras se rompen estableciendose diálogos absurdos. Los objetos toman presencia interpretativa. En determinados instantes nuestras observaciones se tornan interiores, introspectivas, para decretar estados de ánimo o momentos de la consciencia. En algunas de esas circunstancias podemos llegar a pensar que nuestra soledad como individuo es manifiesta.

Lo extravagante. Una máquina de coser adquiere vida, la razón pierde su posición.

Murugarren transita por sucesos autobiográficos, donde las cosas nos cuentan historias, transforman la escena. El ser, es ahora creador, vuelve a la vigorosidad.  La arrogancia creativa, el objeto lo toma, le da poder. Pierde toda consciencia lógica. El crear lo devora.
Bodegón excremental.
La poética del desecho adquiere tintes sagrados, los objetos situados en el centro de la escena componen un altar desolador, el macho travestido pulula a su alrededor.
La escena regresa a lo tragicómico.

jose j*TORRES

Contemplándolo desde aquí, desde el lado de aquellos que nos exponemos en nuestra perseverancia por tener algo que decir, a veces desde la más pura fragilidad, a veces desde la más aplastante contundencia, la palabra festival, desde este lado, no siempre resulta una palabra cómoda para nosotros, una palabra que nos remita a la celebración. 

¿Quién celebra festival?
En ocasiones esta palabra sirve para dar cabida a muchas y diversas intenciones, entre las cuales no siempre se encuentra la de celebrar. Pensando ahora en el eterno debate entre el público, sus expectativas y la creación contemporánea, quizá la celebración sea la clave de la unión. La clave del buen entendimiento.

Parece que en ocasiones quedamos fácilmente atrapados, unos y otros, por mecanismos que son creados desde las mejores intenciones y acaban por ser eso,  meros artefactos que anulan nuestra capacidad de decidir y que una vez puestos en marcha se desconectan de su vital origen, de su urgencia y con esto de su necesidad de celebrar.

Pensando en nuestra condición de isla, paradógicamente se me ocurre que grandes festivales nacionales acaban por convertirse en territorios aislados a los que llegamos como náufragos en busca de tierra firme que nos de la cobertura para exponernos.

Sin embargo, el gran reto de este festival, es el de generar sobre todo posibilidades de redes, de conexiones, propiciando terrenos abonables por los que transitar no sólo hoy, sino con toda seguridad en el futuro.

A ras de suelo propone este modelo festivo tanto para el público (en su no siempre fácil papel de espectador activo), sino para el artista, que busca celebrar su compromiso y compartir su modo de  hacer, aún desde la ardua andadura que en ocasiones supone formar parte de la creación menos convencional.

Quizá por eso, para nosotros también deba ser  fundamental la fiesta de seguir siendo, pese a que muchos seamos una especie de supervivientes que navegamos entre modismos, tendencias, cruzando mares simbólicos y reales, para continuar creciendo en el terreno fértil pero no siempre bien regado de la danza y, como dirían el colectivo de Las Santas, sus contaminantes.

A ras de suelo es ya tierra firme, es una isla bien conectada a través de puentes y autopistas. Un espacio de relación y encuentro. Una fiesta que ignora su condición geográfica isleña para pasar a ser un contenedor de diversidades. Parece que a ras de suelo produce la sensación de una ampliación virtual del territorio en el que se desarrolla, nos abre puertas, nos refresca, y sobre todo celebra el atreverse a poder ser.

Masu fajardo
marzo 2010

Es mentira….
¿Cómo va a ser mentira?
Que si. Te  digo que es mentira.
En todo caso será falseado…
¿Falseado?… falsear es corromper, adulterar, viciar… no puede ser falseado. Es mentira.
¿Qué diferencia hay entre falsear y mentir?

La mentira tiene connotaciones negativas, es algo en general malo, destruye la confianza en la palabra.
Pero a veces la mentira puede ser buena…o por lo menos resulta ser la opción menos mala.
Bueno vale, pero ahí nos metemos en terrenos sobre la ambigüedad de las relaciones humanas
Y entonces ¿qué creías que era todo esto?
Por un instante la habitación quedó en silencio. Sólo podemos ver a uno de los interlocutores, se encuentra sentado ante su escritorio. La habitación está a oscuras. Una pequeña lámpara de tungsteno emite una luz amarilla intensa, que ilumina la mesa.

Un collage de elementos diversos a modo de catálogo de procesos y experimentaciones, conducen al público a descubrir nuevas realidades en el transcurso de YO YA NO. Mentiras aceptadas como verdades porque son agradables de ver y oír, nos transportan a mundos cinematográficos, donde el  tono es poético, anacrónico, nostálgico. Mundos cargados de sutilezas, acciones invisibles. De repente todo se vuelve íntimo, el diálogo es libre, el cuerpo transita entre movimientos fluidos. Aparece lo cómico.
Este proceso es hilado con maestría artesanal, cada escena nos entrega nuevas historias, palabras sueltas de un texto insinuado al espectador. Trucos visuales que conducen a descubrimientos insólitos. La mirada recorre la escena de un lugar a otro esperando ser nuevamente sorprendida.

Es mentira….
¿Cómo va a ser mentira?
Que si. Te  digo que es mentira.
En todo caso será falseado…

jose.j*TORRES

A RAS DE SUELO
danza, vídeo, música y otras experiencias

Casi tocando, casi al nivel de las propuestas, a ras de suelo se presenta con un conjunto de espectáculos alejados de los canales habituales de exhibición, renovando el apoyo a creaciones de estreno y descubriendo nuevos puntos de vista del hábitat urbano. El festival presentado como un paseo por las artes escénicas  contemporánea de carácter transdisciplinar, nos propone una serie de recorridos por la ciudad, donde el espacio urbano se presenta como soporte y los transeúntes como espectadores activos.

Rompiendo las disposiciones convencionales, el evento busca la integración y recuperación del espacio relacional, transformando lo escénico para establecer estructuras más sencillas de mostrar, inventando un espacio no existente.

Entendido en el entorno del cuerpo pero con naturaleza multidisciplinar, a ras de suelo pretende consolidar su apuesta por la  ciudad y situarse en la programación cultural de Las Palmas de Gran Canaria, ofreciendo un proyecto vanguardista y alternativo, que ayude a estabilizar la posición actual de la creación y la exhibición, abriendo paso al diálogo entre la ciudad y su actividad cultural, obteniendo una confrontación de lenguajes e ideas y estimulando los intercambios de información.

En su novena edición el festival  desafía sus principios, mostrando trabajos de coreógrafos, músicos y artistas visuales, que apuestan por una renovación de la escena, enfrentando el cuerpo y la acción, lo visual y lo sonoro. Los terrenos fronterizos entre disciplinas son explotados por los diferentes actores, ofreciendo una muestra que adopta lugares intermedios, con opiniones y estilos de carácter diverso. De ese modo el festival se renueva en cada edición proponiendo un constante reciclaje. El gran reto desde sus inicios en 2002, ha sido permanecer a la escucha, abonar un terreno altamente rico por su pluralidad de lenguajes, formas y modos de expresión, de la danza y la creación contemporánea.

Por otro lado el festival hace una apuesta por creadores vinculados a las islas que trabajan tanto en el ámbito insular como en el exterior. Para ello cuenta con las producciones  apoyadas por el programa de residencias artísticas DAT, consiguiendo una retroalimentación continua y un espacio de sinergias. En ese sentido a ras de suelo es una  plataforma que amplifica y da visibilidad, aportando una cartografía de lenguajes relacionados con el cuerpo y líneas de fuga hacía exploraciones, alteraciones o territorios híbridos.

Con una clara vocación de estímulo a la cultura local, en sus dos ediciones del año 2010, el programa  a ras de suelo recorrerá un conjunto de espectáculos singulares, donde el  cuerpo posibilitará  un juego creativo que ayude a descubrir nuevas formas de expresión, explotando los recursos y materia prima existente en nuestro entorno. Las artes cada día menos compartimentadas encuentran aquí un territorio transfronterizo de libre actividad y expresión, avanzando hacia lo alternativo, rompiendo límites, aportando nuevas lecturas al paisaje de lo cotidiano y  abriendo diálogos entre lo interior y exterior.

a ras de suelo