Una mirada poética y física al desarraigo
“Accidente esperando a ocurrir”, de Carlos Fernández
Publicado en La Razón, 19-11-03
Carlos Fernández lleva al Canto de la Cabra su tercer montaje como director
Carlos Fernández lleva mostrándose en los escenarios desde hace casi una década. Exhibiéndose a través de trabajos dirigidos por otros, como Fernández Lera, Carlos Marquerie, Elena Córdoba y Olga Mesa. Pero mostrando en cada trabajo un mundo propio. Ahora, con la determinación tomada de caminar por libre, Fernández presenta su tercer trabajo como director en Madrid, «Accidente esperando a ocurrir», una mirada de extranjero en la propia ciudad, de un desarraigo que puede convertirse en una de las gratas sorpresas de Escena Contemporánea. El primer aviso lo dio Fernández hace tres años con una pieza de danza hablada que se llamó «Confesiones obscenas» en la que Fernández bailaba y trabajaba desde un código en el que lo personal se confundía con lo escénico. Después, el año pasado, el actor estrenó una obra sobre el amor y la reclusión voluntaria en el micromundo de la pareja con el título de «Llamad a cualquier puerta». En ambos trabajos se comenzaba a vislumbrar una búsqueda de esencias.
Solo nunca más
En «Accidente, esperando a ocurrir» Fernández ha intentado, esta vez desde fuera (es la primera vez que dirige una obra sin ser intérprete), avanzar y concretar esos caminos todavía incipientes por los que quiere transitar. «Para poder hacer eso necesitaba trabajar con más gente. Así que me he arriesgado y he abierto el proceso. Son cuatro actores en escena y tan sólo una, Marisa Amor, tiene experiencia profesional», explica este director que ha elegido a tres intérpretes, Sara Martín, Enrique Castro y Juan Gómez, recién salidos de la escuela. «El trabajo es muy físico, es un trabajo que necesita conocimiento y soltarse. Hay limitaciones, pero también hay una libertad y unas ganas tremendas», confiesa. «La obra la desencadenó la vuelta de un viaje por Asia de dos meses. Volví muy descolocado, fue un batacazo muy potente. En la obra no se cuenta nada del viaje, sino de la mirada objetiva y distante sobre las relaciones y la gente de mi ciudad que la distancia desencadenó», nos explica Fernández.
Diapositivas
La pieza, estructurada en tres partes, está dividida por una serie de diapositivas realizadas por Nekane Santamaría sobre la ciudad y sus habitantes. Tres partes en las que se van combinando el desarraigo, lo descarnado, lo mínimo y los tres textos que Fernández ha escrito para la obra: «Estoy muy obsesionado con la escritura. He optado por una línea que tiene que ver mucho con la narrativa. Creo que los textos son claros, objetivos, hay una tendencia a quitarme de en medio, a despersonalizar respecto a trabajos que he hecho antes». El montaje cuenta con una banda sonora con temas de Sonic Youth y Mogwai. «Accidente esperando a ocurrir» es la tercera obra de este creador que ya anuncia para su próximo proyecto la búsqueda de otros formatos, otros espacios, incluso otras maneras de financiación: «Creo que la situación actual de nuestro teatro está estancada y le falta apertura, pasión, gente nueva, locura, aire. Hay que abrirse y currar, currar y abrirse», asegura con determinación.
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