
Jueves 27 de noviembre, a las 19h
Muestra del trabajo en proceso Casa Pena.
Después de haber colaborado en formato vídeo como PIÑA, sentimos la necesidad de volver a crear juntas y volcarnos en la investigación artística, aprovechando este momento de madurez y exclamación.
Creemos en el estado alterado de la conciencia como posibilidad. Una grieta por donde se cuelan otras dimensiones, otras sensibilidades, otras miradas.
Los procesos traumáticos o lesiones, y la persistencia en hacer lo que sabemos hacer, entendidos como un nuevo punto de partida, nos activan el deseo de investigar sobre la durabilidad del estado de gracia y la posibilidad de continuar creando cuando tus habilidades han mutado.
Después de la visión apocalíptica y el impulso de desaparecer de la tierra de la manera más delicada posible, aparece el reencanto, abriendo un camino en el que no solo tratamos de sobrevivir, sino incluso de vivir con satisfacción. Un camino con muchas estaciones: salir de la cabaña e interactuar con otras personas, reconocer el cuerpo y la mente “dolientes”, el descanso, las apps de workouts que te curan en 20 minutos, la química, los rituales de paso, el deseo de multiplicarnos, o el cuerpo/materia que no genera ni desea ser virtuoso en una danza, sino que quiere encontrarse a sí mismo moviendo realidades propias o ajenas.
Nos sumergiremos en la revisión de la psicobiología, la neurociencia y los procesos neuroeléctricos para extraer conocimiento y contenido que vincularemos a nuestras prácticas sonoras y físicas.
Siendo temáticas históricamente dadas al dramatismo, el romanticismo y el sentimentalismo, nos interesa abordar este proyecto desde una aproximación autobiográfica, absurda y paracientífica.
Entrada libre con reserva en la web