Master 4×18

Últimamente, por las mañanas, Master sólo se dedica a Liang Liang. Con la excusa de lo del grupo Liang Liang lleva días sin salir de casa de Master hasta la hora en la que ya casi les entran las ganas de comer. Por fin ha llegado el calor de verdad, el calor que corresponde a un mes de julio en Barcelona. Eso no cambia. Liang Liang, cuando por fin se decide a salir de la cama, a veces se viste, es decir, se pone unas braguitas y se pasea por la casa de Master, descalza y semidesnuda, como un felino. Master se siente como un animal en celo. Cuando consigue reunir algunas fuerzas para apartarse de ese oscuro objeto de deseo llamado Liang Liang, prepara un desayuno cuatro estrellas que les permite recuperar fuerzas para, en muchas ocasiones, conducirles de nuevo a la cama. Pero se supone que están ensayando juntos para el grupo. Bendito grupo. Así da gusto ensayar. Liang Liang se levanta de la cama desnuda, pone un disco en el tocadiscos, se vuelve a la cama corriendo y se tira encima de Master, que está encantado de recibirla de nuevo. ¿De quién es este disco? Es el primero de Fluzo. ¿Quién es Fluzo? Un grupo de un par de gallegos locos que hacen hip-hop raro. No sabía que te gustase el hip-hop. No escucho mucho hip-hop pero Fluzo es diferente, son unos macarras exquisitos. No creas que me he olvidado de lo del grupo, para que salga bien tenemos que ir conociéndonos poco a poco, por eso es necesario pasar tanto tiempo juntos en la cama y también escuchar música juntos. Ya veo que lo tienes todo superestudiado. Alguien tiene que mantener la cabeza fría para no apartarnos de nuestro objetivo. Ya veo. Un mensaje suena en el móvil de Master. Liang Liang puede recibir cuarenta en una mañana pero el de Master no suena casi nunca, la mayoría de las veces está apagado o en silencio. Por eso cuando suena es casi un acontecimiento. Master alcanza el móvil con la mano y lee el mensaje. Es Lucía. No puede ir a la reunión de la NHA de esta tarde porque se marcha de viaje pero le gustaría quedar con Master para comentarle algunas cosas sobre la reunión. ¿Quién te escribe? Lucía, una amiga. ¿Una amiga muy amiga? Es una muy buena amiga, alguien muy especial. ¿Pero cuánto de especial, como para preocuparme? Lucía es alguien muy especial en el sentido más amplio del término que te puedas imaginar, pero no es alguien que deba preocuparte para nada. ¿Es alguien importante para ti? No sólo es alguien muy importante para mí, también lo es para mucha gente, incluso para muchos que ni siquiera la conocen, como tú. ¿Yo? Sí, tú. ¿Y de qué la conoces tú? Podríamos decir que colaboramos juntos desde hace años. ¿Qué quiere decir que colaboráis juntos, haciendo música? No exactamente. Mira Master, a veces te pones de un misterioso que no sé si es que te quieres hacer el interesante conmigo o es que trabajas para la CIA. Ni una cosa ni la otra, pero más lo segundo. Bah, no seas idiota y cuéntame por qué Lucía es tan especial y tan importante para ti, para mí y para el resto de los mortales. No sólo para los mortales, también para los inmortales. No te pases. ¿De verdad quieres saberlo? Sí, claro que quiero saberlo. Pues te lo voy a contar, ¿tienes un par de horas? Tengo todo el tiempo del mundo, Master. Pero antes dame un beso, pequeña china loca. Toma un beso, idiota.

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