Referentes ficcionalizados, innovaciones fracasadas, intenciones desestructuradas. Espacios de definición que no encuentran asilo, solo constante transformación. Repetición compleja de valores individuales, de comunicaciones codificadas para el espectador. Es en esa amalgama de pérdida referencial donde el observador debe centrar sus esfuerzos. El signo aparece roto, como desechado, dejando en el aire la posibilidad de leer a través de esa ruptura.
“Mis intereses y necesidades en este trabajo andan en la observación de las interferencias entre centros y funciones, en el refracción que resulta entre lenguaje y comportamiento, en el misterio que surge de la experiencia y la apariencia, en la codificación del diálogo a través de la mirada, en armar un dispositivo interno desde el que exponerse, atrapar, contener, movilizar y conservar los manifiestos del cuerpo.” Carmelo Fernández
Dirección e interpretación: Carmelo Fernández
Composición sonora e interpretación: Toño del Barco
Acompañamiento durante la creación: Sonia Gómez
Iluminación: Carmelo Fernández
Vestuario: Javier Murugarren
Con el apoyo de: Leal LAV, Laboratorio de Artes en Vivo. Tenerifek, Graner y SIT (Sala Insular de Teatro).
En diálogo con el Festival SÂLMON<
