Prácticas escénicas con Sonia Gómez II

 

Sábado 10 de mayo

Las investigaciones con la bolsa de agua prosiguen y sirven de calentamiento. Continuamos con un ejercicio por parejas donde alguien sostiene el cuello del bailarín por debajo de las orejas en los huecos que quedan justo antes del cráneo. Tras improvisar un rato de esta forma, el cuello se relaja y, cuando improvisamos sin la ayuda de un compañero pero con el recuerdo del ejercicio, nos movemos con mayor agilidad. A mí en especial me resultó mucho más fácil hacer giros. Lo cual me recuerda lo que dice mi profesora de técnica Alexander, Ariadna Fäustino. Según ella hay varios estudios que demuestran que los vertebrados, antes de ejercer ningún movimiento, comienzan por movilizar la musculatura del cuello. Por eso en Alexander siempre se empieza por relajar el cuello, porque se entiende que es la clave que después permite mover otras zonas con libertad.

Luego suenan una por una las canciones que han traído los participantes y que quizás formarán parte de sus proyectos. En cada ocasión improvisa un grupo de alumnos mientras que quién ha traído la canción observa a los demás y toma notas. Así obtiene posibles formas de interpretar la música que provienen de los demás y que quizás no se le hubiesen ocurrido solo. Al mismo tiempo, al trabajar un material que no es tuyo, es más fácil obtener formas nuevas de moverse porque el vínculo personal es menor y eso disminuye la presión.

La segunda parte de la clase se dedica a tutorías individuales de 10 minutos donde cada uno de los asistentes presenta a Sonia su proyecto (que puede ir desde una investigación personal a la preparación de un espectáculo). En cada caso Sonia aporta su punto de vista y hace preguntas que ayudan a descubrir posibles obstáculos o virtudes de las que no éramos conscientes. Mientras, el resto de la clase intenta encontrar respuestas personales a un cuestionario que ha distribuido Sonia y que está relacionado con nuestro proyecto personal. El cuestionario plantea las siguientes preguntas:

-¿Podéis imaginar en qué os gustaría invertir vuestro tiempo?

-¿Qué anticipáis de forma clara en este proyecto, ya sea un aspecto grande o pequeño del mismo?

-¿Podéis escribir sobre papel de qué se trata? ¿Podéis escribir una sola frase, cinco o diez sobre el tema?

-¿Podéis hacer un dibujo o crear una imagen plástica?

-¿Podéis hacer una serie de movimientos improvisados al respecto?

-¿Podéis explicar con palabras de qué se trata?

-¿Es divertido?

-¿Puedes hacer de esta idea un producto?

-¿Es público o privado?

-¿Qué sacas de hacer esto?

-Y si fuera público, ¿qué sacaría el espectador?

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