The Act of Seeing with One’s Own Eyes de Stan Brakhage

El martes 1 marzo nos reunimos para ver juntos la película de Brakhage sobre la morgue de Pittsburgh.

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The Act of Seeing with One’s Own Eyes (El acto de ver con los propios ojos, 1971), un corto experimental del realizador vanguardista Stan Brakhage, se encuentra entre los más duros retratos sobre la muerte en los anales del cine. No es el proceso de morir; ni las implicaciones psicológicas de nuestra mortalidad; ni las preguntas existenciales inherentes a la finitud de la vida. No es un tratado sobre las preguntas filosóficas o religiosas que rodean a la muerte. No es ni siquiera una documentación de los aspectos médicos, científicos o jurídicos de las autopsias. Es, como sugiere el título, el acto sumamente personal de ver con los propios ojos (traducción literal de la palabra autopsia, del griego autopsía), una resuelta, inexorable y sencilla ventana al destino del cuerpo físico […]

 

Cita del ensayo titulado: Sentido, mortalidad y el acto de ver de Haley Cotter

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Antes de la proyección leímos juntos este texto de Ramón y Cajal:

“Conocido el entusiasmo de mi padre por la anatomía, y su vocación decidida por la enseñanza, adivinará fácilmente el lector el celo y ardor puestos en el desempeño de su cometido y la decisión de convertir a su hijo en hábil disector.

Hétenos, pues, a los dos metidos en harina, como suele decirse. ¡Y con maestro tal, cualquiera escurría el bulto! Tres años nos pasamos en aquella humilde sala de disección, perdida en la huerta del viejo Hospital de Santa Engracia, desmontando pieza por pieza la enrevesada máquina de músculos, nervios y vasos, y comprobando las lindas cosas que nos contaban los anatómicos. Ante la imponente losa anatómica, protestaron al principio cerebro y estómago, pronto vino, empero, la adaptación. En adelante vi en el cadáver, no la muerte, con su cortejo de tristes sugestiones, sino el admirable artificio de la vida.”

Mi Infancia y juventud, Santiago Ramón y Cajal