No quiero hablar

Ayer, en la universidad, me encontré con un escritor bastante famoso. Me dio un toquecito en la espalda y me dijo: Ven conmigo. Lo seguí, asombrado. Me llevó a parte, en un pasillo y me explicó que yo había tenido una idea muy buena, según él. Quería que participara en una conferencia que iba a dar él, junto a otro tío, preparándome un artículo sobre el tema. Yo le digo que no quiero hablar sobre ese tema, todavía no. Pero me siento muy halagado.

Esta entrada fue publicada en Astronauta ficción. Guarda el enlace permanente.