EL ARTE DE LA POLLA
Veo, por aquí, y por allí, chicos en escena que utilizan su polla como elemento clave de su propuesta. Lo que me llama la atención de todos estos trabajos, y por eso los he seleccionado, es que no responden al arquetipo de falo, que desde la Antigüedad ha encarnado valores sagrados como la fertilidad, la buena suerte o la potencia. De hecho, el teatro nació en los rituales de fertilidad en los que el coro llevaba falos de cuero.
Con respecto al falo y la obsesión en torno a ello, las cosas no han cambiado mucho; pensemos en la ubicuidad triunfal del porno, donde una polla no puede aparecer si no es empalmada, produciendo, aguantando. Los romanos llamaban a este falo el ?fascinus? ?de ahí viene la palabra fascinar- y sus imágenes llenaban las puertas de las casas y los jardines. Pero los romanos tenían también un nombre para la polla flojita, tranquila, que se toma su tiempo, que no es arquitectura. La llamaban mentula.
Los artistas que vamos a ver a continuación trabajan con la mentula, tradicionalmente estigmatizada, considerada la vergüenza del falo. No puede ser casualidad que aquí y allí, últimamente, encontremos mentulas protagonistas. Creo que es un proceso similar al que ha llevado a muchas artistas a observar de otra manera el coño en escena ?recordemos el ?arte del coño? de los años 70-. De hecho, algunos de los ejemplos que vamos a analizar tienen conexiones con obras de artistas feministas de esa época. También hay que decir que en esta videoplaylist hay ausencias, porque el vídeo no resiste en internet sin ser censurado: es el caso de un ruso que se hizo rápidamente famoso con su parodia de Piratas del Caribe, bailando desnudo; el vídeo ha desaparecido. Dignos de mención son también Proyectos Poplíteos, a los que vi en Madrid en 2012, difíciles también de mostrar sin que salten las alarmas. Aprovechemos pues que los siguientes vídeos aún no han sido descubiertos:
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El Conde de Torrefiel: Escenas para una conversación... (2012)
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Las marionetas del pene
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LMFAO: Sexy And I Know It (2011)
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Vicente Colomar: Manual básico de cine experimental (2011)
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Pricasso
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Fiacha O'Donnell: Se toca pero no se mira (2010)
El Conde de Torrefiel: Escenas para una conversación... (2012)
La escena inicial de esta obra de El Conde de Torrefiel se abre con una lenta y delicada erección, a cargo de David Mallols, mientras otro compañero en escena -Pablo Gisbert- nos cuenta una historia, de espaldas. Nunca habíamos contemplado una erección; siempre las habíamos rodeado de ajetreo, de prisas, de exigencias, códigos y normas. Es la primera vez que dejamos que la polla se tome su tiempo para moverse.
Discípulos de Uzume
Los artistas que mueven la colita para buscar nuestra risa son, quizá sin saberlo, fieles discípulos de Uzume. Es la diosa japonesa de la risa: cuando el mundo estaba sumido en la oscuridad porque la diosa del Sol no quería salir de su cueva, Uzume se subió a un tonel, se puso a bailar y se levantó la falda, para que se rieran todos los dioses. El sol salió, intrigada, y así consiguieron que volviera la luz.
Las marionetas del pene
Los australianos Simon Morley y David Friendly crearon este espectáculo después de que Morley descubriera y perfeccionara su talento para la globoflexia. Aquí sólo un ejemplo de todas las figuritas que saben hacer, cada una de ellas acompañadas de una pequeña historia. Hemos elegido este momento porque nos recuerda mucho a la leyenda de Uzume, en la que el clamor del público consigue que la diosa del Sol salga de la cueva.
LMFAO: Sexy And I Know It (2011)
Aquí la comicidad no está en la provocación de la polla desnuda, sino en una revisión del ?marcar paquete?. LMFAO marca paquete ?toda la canción es una apología del seducir insinuando, del bañador speedo-, pero es un paquete saltarín, muelle. La seducción no está en la potencia y la dureza sino en el carácter juguetón y afable.
Vicente Colomar: Manual básico de cine experimental (2011)
Vicente Colomar construye su Manual Básico de Cine Experimental a partir de la parodia de cine negro, protagonizado siempre por un héroe viril y rudo. En esta escena el héroe entona -en playback- una canción de Julio Iglesias, otro galán por excelencia. La mentula permanece plácida.
Hasta aquí los discípulos de Uzume. Ahora vamos a desgranar dos ejemplos de ?arte de la polla? en la estela del arte feminista de los 60 y 70.
Pricasso
Otro australiano. Tim Path se ha hecho célebre por pintar lienzos con la polla, retratando a Bush, a la Reina de Inglaterra o su admirador Hugh Hefner. Eligió su nombre artístico fusionando ?prick? -que quiere decir polla pero también tonto, como tontopolla-, con Picasso, gran machote de la pintura occidental. Un caso interesante, falo y mentula a la vez. El pincel como falo simbólico del artista ha sido largamente estudiado. Sin embargo Pricasso se asegura de que nunca sepamos si está erecto o no; de hecho él más bien permanece quieto y mueve el lienzo alrededor. Sea como fuere, nos recuerda mucho a Shigeko Kubota y su Vagina Painting (1965).
Fiacha O'Donnell: Se toca pero no se mira (2010)
Reformance es un festival en el que se proponen homenajes o revisiones a obras de otros artistas. Fiacha O?Donnell realizó este ?Se toca pero no se mira? a partir de ?Tapp-und-tast-kino? de Valie Export (1968), en el que la artista portaba un teatrillo sobre ella para que los transeúntes le tocaran las tetas.
Fiacha, en plena plaza de Lavapiés, Madrid, ofrece su misterio para que toquemos sin mirar. Los vecinos del barrio contemplan la performance asombrados. Los niños se arremolinan, preguntando qué hay ahí, y Fiacha intenta eludirlos. Los demás hacemos cola. Cuando llega el momento, metemos la mano, hasta el fondo, tocamos y emitimos un grito de terror, o nos reímos, o retiramos la mano como si nos hubiéramos quemado. El misterio es lo que tiene.
El hallazgo del término mentula se debe a Pascal Quignard en su hermoso libro El sexo y el espanto.
Agradecimientos: Lucía Olalla, Ester Zaragozá.